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Jerarquía de necesidades (pirámide de Maslow). |
psicólogo en zaragoza
"Nadie sueña con ser como alguien que vive exactamente como los demás" Escuche esta frase en un anuncio publicitario de una marca de coches, me parece un gran ejemplo de cómo puede apelarse a la emoción, para producir la compra impulsiva mediante el viejo truco de la comparación social, que es algo así como el ABC de la manipulación comercial, comprame esto y serás diferente, serás superior, serás especial.
"Nadie sueña con ser como alguien que vive exactamente como los demás" Escuche esta frase en un anuncio publicitario de una marca de coches, me parece un gran ejemplo de cómo puede apelarse a la emoción, para producir la compra impulsiva mediante el viejo truco de la comparación social, que es algo así como el ABC de la manipulación comercial, comprame esto y serás diferente, serás superior, serás especial.
Parece que los demás se han convertido hoy en una buena excusa para justificar cualquier impulso, especialmente cuando nos los presentan como una amenaza, ya desde pequeños nos comparan con otros niños/as, mas buenos, mas estudiosos, y más obedientes, mas tarde en la universidad nos ofrecen masters y cursos para empezar a diferenciarnos, y nos repiten una y otra vez la misma pregunta “¿en qué eres tú diferente de todos esos miles de licenciados que terminan cada año esta carrera?” y sin saber cómo, empezamos a angustiarnos, a estar inquietos por superar a esas personas, a quienes luego se supone que debemos servir; también los gurús de la autoayuda se han apresurado a colocarles apelativos a los demás, a catalogarlos como "gente toxica" para justificar actitudes despreciativas contra quien no es de nuestro agrado, hasta el punto de que con uno de estos libros en la mano, resulta posible creerse la única persona sana del planeta, es un yo contra el mundo, que nunca termina bien.
En el otro extremo, y especialmente por parte de títulos vinculados a la nueva era se nos ha predicado el amor incondicional, y la renuncia al discernimiento como si eso fuese una vía de liberación, estos enfoques dicotomicos son distorsiones que no dejan de ser un mero error de etiquetación uno lleva a un prejuicio, y el otro a un fomento de la irracionalidad y al pensamiento mágico, curiosamente las dos fórmulas siguen siendo hoy día igual de efectivas que ayer, y es que no hay nada como la comparación social, para forzarnos a realizar acciones que van en contra de nuestros valores. Desde comprar ese boleto de lotería que habíamos decidido no adquirir "no le va a tocar a toda la empresa y a ti no, imaginate la cara que se te va a quedar" pasando por la manipulación de nuestros derechos "¿No iras a votar a ese partido minoritario? eso es tirar el voto a la basura, le estas regalando el voto a nuestros enemigos" hasta llegar a extremos más graves, como la justificación del padecimiento psíquico o físico, infringido o recibido, en base a premisas aberrantes de pensamiento mágico, codificadas en frases de corrientes pseudoterapeuticas o esotericas del estilo "la vida es un espejo" cabe preguntarse, si al ceder a estos extremos nos adueñamos de nuestras vidas o bien estamos cediendo nuestra dignidad a enfoques potencialmente coercitivos.
Cuando nos dicen “los demás” todos pensamos en quienes nos rodean, sin darnos cuenta de que nuestra aparente vulgaridad podría ser para muchos objeto de envidia, millones de personas envidian al que se queja del mal sabor del agua, cuando no tienen acceso a ella, o quisieran vivir en una ciudad en la que no tienen que andar esquivando bombas, apedreamientos, o no te pegan un tiro para robarte el dinero y el teléfono; pero sin llegar a esos ejemplos tan extremos podemos mirar aquí mismo ,en España, especialmente desde el año 2008 y veremos a millones de jóvenes, y no tan jóvenes, que estarian encantados de "conformarse" con un trabajo estable,por aburrido que este fuese. Las generaciones "mejor preparadas" se vieron un dia en la calle con un exceso de titulaciones en la mano y un mundo caducado en la cabeza, preparados para otra sociedad, pero viviendo en un sistema que se replegaba hacia lo más básico, y que recortaba en servicios terciarios e I+D+I. Esto atrapó a generaciones enteras entre el paternalismo de aquellos que no habían tenido el placer de enfrentarse a una de las mayores crisis económicas que se recuerdan desde los años 20 por un lado, y la cháchara irracionalmente optimista de muchos “coach” por el otro, que les animaban a perseguir sus sueños, sueños que para muchos se convirtieron en una auténtica pesadilla.
¿Sabeis que? creo que lo peor no es ser vulgar, como dice el personaje de Angela Hayes en American Beauty, casi todas las vidas terminan por ser mediocres para las personas que mantienen unos niveles de exigencia irracionales, y cada uno de nosotros sabemos enriquecer la aparente mediocridad que viene de la mirada de los insatisfechos con nuestra propia historia, donde cualquier observador externo sólo percibe un dia normal puede haber mil y una elaboraciones, felicidades y tristezas.
Lo contrario es lo que les sucede a aquellos adeptos al aquí y al ahora al famoso mindfulness cuando se explica, se interpreta, y se practica equivocadamente (Sin supervisores formados en programas homologados) estos se ven envueltos en un mundo sin expectativas ni elaboración mental, una vida limitada al disfrute de lo que tienen enfrente, con el sentido impuesto desde fuera, liberados de la ansiedad, pero condenados a la limitación, ignorando la gran virtud de la imaginación, pasando por alto que todos nuestros avances, políticos, tecnológicos y artísticos, provienen precisamente de personas que no se conformaban con el aquí, ni con el ahora, o como decía Bernard Shaw "algunos ven lo que hay y se preguntan ¿por qué? yo sin embargo sueño cosas que nunca existieron y me pregunto ¿Por qué no?".
Lo contrario es lo que les sucede a aquellos adeptos al aquí y al ahora al famoso mindfulness cuando se explica, se interpreta, y se practica equivocadamente (Sin supervisores formados en programas homologados) estos se ven envueltos en un mundo sin expectativas ni elaboración mental, una vida limitada al disfrute de lo que tienen enfrente, con el sentido impuesto desde fuera, liberados de la ansiedad, pero condenados a la limitación, ignorando la gran virtud de la imaginación, pasando por alto que todos nuestros avances, políticos, tecnológicos y artísticos, provienen precisamente de personas que no se conformaban con el aquí, ni con el ahora, o como decía Bernard Shaw "algunos ven lo que hay y se preguntan ¿por qué? yo sin embargo sueño cosas que nunca existieron y me pregunto ¿Por qué no?".
Por eso hacia dónde merece la pena volver la mirada no es hacia los que viven de forma extraordinariamente distinta, sino hacia toda esa gente que no llega a vivir como los demás, la inadaptación terrible que se traduce en graves fracturas sociales, y que lleva en la mayoría de los casos a la marginación de colectivos enteros, merece la pena darse cuenta, de que incluso en el otro extremo, el presuntamente deseado icono, ese genio o esa estrella del rock adolescente, o bien cualquiera de las figuras a las que nos animan a admirar desde los anuncios de la TV terminan tambien muchas veces víctimas de sus propias excentricidades, cuando no de los excesos de la fama o las drogas, la publicidad nos ha hecho confundir la autorrealización con lo que “debería” ser nuestra vida, hemos fijado tanto la mirada en lo alto de la pirámide de Maslow que a más de uno se le ha olvidado por el camino que sin las bases todo pierde el sentido,da igual dedicar años a dar rienda suelta a nuestra creatividad si antes no hemos trabajado esas bases, y en esos primeros cimientos inevitablemente están los otros, nadie puede valerse totalmente por sí mismo, al menos no para siempre, la vida sabrá a tristeza y a carencia, y cualquier pasión terminará siendo una mera adicción, una evasión en el peor de los casos, si no contamos, precisamente, con todos los demás.
Carlos Sanz Andrea.

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Excelente
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